sábado, 14 de abril de 2012

Tú!

Cuando el mundo deja de sorprenderte con los pequeños detalles
que te regala día a día y das por sentado que sabes cabalgar cuando
ni siquiera las riendas logras sujetar con firmeza; Mientras que tu vida se encuentra detenida invitándote a deleitarte con sus pequeños obsequios de
felicidad... Esos deliciosas minutos de sabiduría dirigidos por el corazón se
convierten en la fuente principal de tu motivación.
La puerta de la saciedad se vuelve más estrecha robándole a tu corazón suspiros
bañados con la esencia de lo desconocido; Un placer que sólo logras sentir si mantienes los ojos cerrados y tus sentidos despiertos.
Si tus inquietudes decrecen inversamente proporcional a lo que tu cuerpo se emociona... Podrás regalarme la satisfacción que siente el segundo plato en la balanza que logra el equilibrio entre lo deseado y descartado.
Decodificar estas líneas es saber darle a mis llaves su correcto uso...!
Mi ilusión como mi fé se renuevan día a día... Como fortificante eligiendote a tí.